La Garganta del Salto del Tigre

Nos encontramos en la provincia de Yunnan, a unos 60 km de la ciudad de Lijiang las aguas del río Yangzi han creado una de las gargantas más profundas del mundo.

- No puede ser, ahora mismo me calzo las botas y nos vamos a comprobarlo.- Dejamos todo lo que era prescindible en Lijiang y cogimos un autobus local.

El nombre de la garganta, Hutiao Xia en chino, proviene de una antigua leyenda que cuenta cómo un tigre escapó de un cazador que pasaba por la zona saltando de un extremo a otro del desfiladero en su zona más estrecha.

Llegamos, pateamos, vimos y flipamos. Los tres coincidimos en que jamas hicimos un trekking que fuera tan impactante, tal vez Monte Bromo (Indonesia) nos dejo tambien con la boca abierta pero esas paredes parecen imposibles de existir, aun las miro y me parecen como de broma, me cuesta creerme como es posible un desnivel de 3900 m, practicamente vertical en muchos puntos, desde el cauce de ese grandioso rio hasta los picos nevados de 5500 m.

Habia dos rutas posibles, una por lo alto de la montagna y otra “cerca” del rio (dependiendo de como lo consideres de cerca) por carretera. Empezamos subiendo alto por la primera ruta y esa noche la pasamos en un hostal en mitad de la montagna literalmente hablando,  vistas increibles, comida rica y abundante, buena compagnia y un suegno reparador. Nos levantamos con espiritu emprendedor y seguimos hasta el final, terminamos la garganta no sin sudarla como es debido y vajamos todo el desnivel hasta el mismisimo cauce. Despues de comprovar que cruzarlo en ferri para llegar al siguiente pueblo era pagar mas de una noche de hostal decidimos darnos media vuelta y deshacer lo andado por la segunda ruta, no sin antes disfrutar de otra apacible noche frente a las paredes del mundo. La comida en este segundo albergue merece especial mencion, y es que no estamos acostumbrados a disfrutar semejantes pelotazos en tales circunstancias. La familia que nos acogio, pensamos que de origen tibetano, nos deleito con unos bailes regionales que compartieron gustosos con nosotros. Despertar, otro pelotazo energetico y casi 30 km de vuelta por la segunda ruta. No dabamos credito, las frases de : -no somos conscientes- y -no nos damos cuenta- fueron repetidas hasta la saciedad.

Como anecdota graciosa entre tantas esta la caida de la camara de Ignaki por la garganta mientras se comia un platano. Al final, y por supuesto en nombre de la agrupacion pro-muerte, Ignaki recupero su camara 50 m. mas  abajo y para asombro de todos funcionaba.

Sin duda nunca olvidaremos el mejor trekk de nuestras vidas (hasta el momento…) . 

Una pizca de China

Por fin entramos a este gigante que no para de depararnos sorpesas. La entrada ya fue de por si,  un tanto especial…a Antonio y a mi nos retuvieron en la frontera, todavia no sabemos muy bien  porque, pero desde entonces todo han sido buenas sensaciones. La primera impresion fue bastante impactante…nadie hablaba ingles, todo estaba en un alfabeto con el que no estabamos familiarizados, la ciudad a la que llegamos (Nanning) era un monstrenco en pleno crecimiento, edificios enormes de oficinas con enormes centros comerciales por todos los lados, y sobretodos chinos muchos chinos…jejeje bueno eso era de esperar, pero los mas curioso es que apenas se ve un occidental, a diferencia del Sudeste Asiatico. Despues de disfrutar de la rica comida local y de alucinar con la tecnologia y modernidad con la que cuentan estos chinos, nos dirigimos a Yangshuo.

En teoria un reducto de todo viajero occidental, Yangshuo encuadrado en la region de Guanxi, es ante todo un parasiso de la naturaleza (que por lo visto los chinos no valoran mucho) donde se puede disfrutar de paisajes increibles, y de impresionantes picos de roca caliza alla donde tu vista alcance. El tiempo no nos acompanio mucho (puesto que pasamos muuucho frio) pero la ciudad nos acogio de forma maravillosa y decidimos alargar nuestra estancia alli, lejos de las ruidosas ciudades chinas…Rutas en bici, trekkings, escalada amateur (con cierto peligro eh Antonio jejeje) en definitiva una bonita fusion con la naturaleza, la ciudad, enclavada en un valle imposible, y hasta donde se pudo con la gente. Y es que nuestras nociones de chino no son muy buenas y las de ingles de los chinos escasas por no decir nulas…pero tambien es gracioso ver como nuestras habilidades  gesticulantes van mejorando dia a dia.

 Sin muchas ganas de separarnos de aquel paisaje pero con la idea de seguir ruta, decidimos emprender una de esas palizas viajeras que tanto amamos  ultimamente… Primero bus por la maniana y a media tarde un tren nocturno que nos dejo en Kunming a las once de la maniana del dia siguiente. Y un fuerte impacto de nuevo: La estacion de tren repleta de grupos de gente etnicamente muy distintos a los chinos,  una variedad de etnias minoritarias que, en Yunnan la nueva region a la que habiamos llegado, representan el 50 % de la poblacion. Y de nuevo la duda…a donde nos dirigimos? decidimos un lugar, no hay billetes. Cambiamos el chip, nuevo destino, ahora en bus, Lijiang, a ver que tal. Increible es de nuevo la respuesta. No escogemos al azar los lugares a los que vamos pero eso no quita para que no dejen de sorprendernos.

 Imaginaros la tipica imagen de ciudad china con casas bajas de adobe, teja, madera y farolillos por doquier, calles empedradas y comerciantes en cada esquina intentando sacaros unos yuanes por cualquiera de sus productos, todo ello aderezado con una montania de mas de 5500 metros de alturas a los pies de la ciudad, imaginaros eso y nos vereis a nosotros, alucinando con cada recodo de la ciudad, con la montania, los lagos y con la gente que puebla este lugar. Son los Naxi, una tribu de origen tibetano y de creencia animista que visten un curioso traje azul y que cuentan con una fuerte tradicion y costumbres, entre las que mas llaman la atencion, sus bailes y su musica, que desde nuestro punto de vista tiene un toque muy andino…coincidencia? Y de nuevo el mismo plan, disfrutar de aquel maravilloso entorno con la bici, andando…Hasta que se nos ocurrio hacernos un trekking por una tal Garganta del Salto del Tigre, madre mia que gran decision…

Hanoi

 Hay ciudades con encanto y Hanoi lo tiene. Nuestra idea preconcebida debida a los viajeros que nos habiamos ido encontrando era de una ciudad gris, no muy atractiva, capital de un pais en continuo cambio. Sin embargo lo que nos encontramos nos sorprendio gratamente. Para mi fue como la ciudad que toda persona espera encontrarse cuando viene a Asia. Una ciudad dinamica, repleta de bicis, motos, callejuelas pequenias e intrincadas llenas de puestecillos de fruta, sopillas, carne… una mezcla entre Oriente y Occidente, una ciudad de Asia con un toque occidental y de modernizacion pero sin perder su esencia.

Lo unico que se cumplio de las advertencias de nuestros “viajeros consejeros” fue el frio. Muuucho frio, el mayor que hemos pasado en todo el viaje. Quiza fue porque no estabamos aclimatados, o quiza porque el ambiente es tan humedo que realmente tienes la sensacion de tener a un vietnamita soplandote hielo en los huesos, pero el caso es que aun armados con todo nuestro arsenal para el frio (que tampoco es muy abundante claro)  pasamos un par de dias que pareciamos caribenios sacados de contexto. Los ultimos dias, el Sol hizo timidas apariciones y la humedad bajo, lo que nos permitio disfrutar cuando llego Antonio de la ciudad con un clima mucho mas agradable.

La ciudad, ademas del encanto de pasear por el Barrio Antiguo y maravillarse con sus mercados, sus cafes estilosos y sus tiendas para todos los gustos, tiene otros encantos que la hacen merecedora de una visita siempre que se venga a Vietnam. Vimos a Ho Chi Minh embalsamado, en su mausoleo, un espectaculo un tanto grotesco a mi gusto (mas sabiendo que el queria una simple incineracion) fuimos tambien a un par de museos, el mas interestante el Museo Etnologico, muy bien montado con videos, maquetas y claras explicaciones en ingles y frances, y por supuesto los lagos, maravillosos lagos de Hanoi, donde se suponen que habitan gigantes tortugas que de vez en cuando aparecen para desear buena suerte a la gente.

Una bonita ciudad que vivimos con intensidad durante una semana. Quiza porque era nuestra ultima parada en Vietnam y la puerta a nuestra siguiente aventura,  la Gran China….

Halong Bay

 

En los mares de la China del sur, mas alla de las montagnas que se encuentran entre Hanoi y la costa, la naturaleza ha creado unos de esos paisajes que se salen de la realidad a la que estamos acostumbrados. Una de las maravillas que nos esperaban en nuestro viaje y con la que no contabamos hasta adentrarnos en este valle de mas de 3000 islas-montagna en mitad del oceano. Este paisaje de otro mundo es curiosamente patrimonio de la humanidad, como si la UNESCO tratase de acercar al hombre un paraje que nunca le fue suyo. De hecho las islas son, en su mayor parte, inalcanzables salvo para escaladores e intrepidos que lleguen en un barco. Algunas de estas islas calcareas esconden ademas cuevas de gran tamagno en su interior. La impresion de encontrarse en un terreno inabarcable e inalcanzable produce cierta sensacion de impotencia que no se tiene en tierra firme donde cualquier pico es coronable a pie.

Nosotros contratamos en esta ocasion un viaje organizdo que era la forma mas comoda de visitar esta maravilla. Viaje en autobus, paseo en barco con comida incluida a traves de la bahia, vista a las cuevas y vuelta al hogar. Aquel dia el sol salio de entre las nubes o quizas fuimos nosotros los que salimos de la boina nubosa de Hanoi. Estuvimos tambien acompagnados, como en gran parte de nuestra estancia en Hanoi, por Miki y Naira que compartieron con nosotros esta experiencia paisajistica en la que nos trasladamos a otro mundo por unas horas.

Reencuentros en la tercera fase

Si, estoy de vuelta, estoy en Vitnam, estoy con mis amiguitos.

Esta pequegna aventura de tres semanas ha sido sin duda una experiencia inolvidable, mi primera experiencia en solitario, y la mas emocionante hasta ahora. Todo ha salido a pedir de boca,  Buddah, Alah, Jesucristo y la mismisima Trimurti han estado de mi lado en todo moment.

Comenze con el pequegno viaje desde Sahvanaket en Laos hasta Pai en Thailand, recorriendo mas de mil kilometros en 30 horas de autobuses para llegar justo a tiempo al festival de musica, alli me encontre con toda esta gente, increible el festival, lleno de thais y gente de todo tipo, no he visto tanta rasta junta en mi vida. En pai disfrute de la buena vida, del buen comer y de la fantastica compagnia que me brindaron mis compadres, la evolucion en mi ingles ha sido increible. Tras relajarme en un bungalow hecho de bamboo en inmejorable situacion, enclavado en mitad del campo y a 10 mn andando del centro del pueblo, decidi comprarme una hamaca y ponerla a prueba en las islas del sur. Alla nos fuimos mis rastas y yo, a Ko Chan a 6 horas de Bangkok y a 22 de Pai, no hay problema, viajes mas largos me he metido entre pecho y espalda. Ya en Ko Chan decidi ubicarme en la Playa mas remota y de mas dificil acceso intentando huir de el ferviente turisteo anglosajon, mision cumplida, la carretera que llevaba hasta este pequegno resort se ha llevado la vida de mas de un turista inexperto y ha marcado a otros que creian saber utilizar correctamente una motocicleta (el unico acceso es a traves de una via empedrada y de fuertes pendientesque dan directamente al mar).

Un bungalow, por detras la jungla y por delante una playa paradisiaca digna de cualquier postal, la mejor que he catado hasta ahora, comida excelente, sin agua corriente, sin luz y por supuesto sin internet ni ningun otro capricho similar. El continuo susurro del mar desde que me levantaba hasta que me dormia y mi hamaca dispuesta a colgarse entre cualiera de las miles de palmeras que limitaban dicha playa con el resto de la escarpada isla. Por supuesto no estaba solo, algunos turistas se habian acercado a saborear esta delicia, pero no eran los tipicos que buscan la playa como si fuera una macrodiscoteca, esos estaban en la otra costa.

Tras disfrutar durante solo 4 dias de esta maravilla me vi obligado a partir hacia Bangkok, mis planes eran viajar en avion hasta Hanoi y encontrarme con mis amigos para cruzar juntos la frontera, la aventura habia terminado. Eso era lo que pensaba hasta que al llegar a la capital me entere de que al dia siguiente era fiesta, el dia en el que pretendia recoger mi pasaporte que estaba en la embajada de China por que mi avion salia al dia siguiente a las 10:20 a.m.. La unica solucion era recoger el passport el mismo dia que el vuelo, y tenia una hora y veinte minutos a partir de las 9 a.m. hora de apertura de la embajada, para cruzar Bangkok en hora punta y llegar a tiempo al aeropuerto para coger el avion. Tras hablar con un taxista mis ilusiones se esfumaron, me dijo que a esas horas necesitas al menos una hora para atravesar las concurridas y congestionadas calles de la ciudad. Otros se habrian ido directamente a comprar otro billete pero yo decidi apostar doble o nada, si no llegaba a tiempo, comprar un billete en el mismo dia me saldria bastante mas caro de lo que me habia costado el mio.

La ultima noche fue dura, el nerviosismo de no saber si me daria tiempo o no no me dejaba conciliar el suegno. Tras dormir tres horas y plantarme en la embajada 10 mn antes de la apertura de puertas consigo mi passport. Solo tengo 1 hora y 10 mn. El taxista me deja el movil para que llame a la compagnia aerea, tengo 30 mn para el checking de mi mochila, mi corazon late fuerte y el taxista conduce a solo 100 por hora, podria haber corrido mas deprisa con mis mochilas a la espalda. Cogemos la highway directos a la terminal del aeropuerto y ahorramos bastante tiempo. Tengo 35 mn, 25 realmente por que la puerta de embarque cierra 10 mn antes de cada vuelo, no hay tiempo para el checking, corro como nunca he corrido ( bueno con Muten en Francia tuve una experiencia similar) por el aeropuerto, busco la compagnia aerea, me registran las mochilas y tras sacarme la pasta de dientes, el desodorante, el antimosquitos y una navaja  (lo siento hermanos Torrego vuestra navaja suiza me fue muy util) deciden que ya no soy peligroso para viajar en avion provocandome un amago de infarto por la perdida de tiempo y por que casi me pierden el pasaporte. Sigo corriendo, vislumbro la puerta de embarque en la lejania, parece seguir abierta o eso es lo que quiero pensar. La cruzo, 1 mn despues se cierra. Lo logre e incluso me sobro un minuto.

Plantar el culo en un asiento nunca fue tan reconfortante.

Volvemos a ser tres y el rumbo vuelve a su curso, la primera impresion de la capital es de fuerte contraste con Bangkok, riadas de motos haciendo sonar el claxon a cada movimiento y el ajetreado sin parar de los vietnamitas de la capital que no cesan de trabajar no nos impide tomarnos unas cagnas con Miki, Naira y algun que otro percha en una tranquila calle de la ciudad. Magnana cruzamos la frontera y pondremos los pies en la grandiosa China.

DMZ o zona desmilitarizada, en teoria…

Es curioso aplicar este nombre a una de las zonas mas castigadas por las bombas estadounidenses durante la guerra… En teoria, despues de los acuerdos de Ginebra, tras ganar los vietnamitas a los franceses la Primera Guerra de Indochina, se acordo establecer una linea de separacion entre Vietnam del Sur y Vietnam del Norte (comunista) para mas tarde, a traves de elecciones reunificar todo Vietnam. Como EE.UU sabia que Ho Chi Minh ganaria de forma masiva en el Sur, nunca dejo que las elecciones se llevaran a cabo y empezo a apoyar al Gobierno del Sur mas y mas, hasta acabar con mas de 500.000 soldados al mismo tiempo “apoyando” al ejercito del Sur.

Fue esa zona desmilitarizada la que fuimos visitar, esa frontera del paralelo 17 creada por mentes perversas en Suiza y marcada geograficamente por un rio. No tuvimos que levantar muy pronto, horario vietnamita y coger el bus que nos llevaria al frio valle que separa Norte y Sur, una linea imaginaria que va del mar a la frontera de Laos. Hacia mucho frio, la humedad y la neblina acompaniaba mas que nunca nuestro pequena retrospeccion al pasado. Empezamos la visita viendo una montania que los americanos se empeniaron en controlar y a la que solo se podia acceder en helicoptero, no quedaba nada. Esta fue una constante durante la visita, los green goes no dejaban nada cuando se retiraban, no querian dejar evidencias que pudiesen servir de propaganda a los comunistas. Fuimos tambien al campamento de Khe San, un lugar en el que los americanos creyeron que se enfrentarian por fin en guerra abierta con los escurridizos norvietnamitas, no termino de llegar, era puro humo que los americanos se tragaron, mientras, los norvietnamitas se colaban por miles para luchar al estilo guerrilla por la densa jungla.

Lo mas impresionante sin duda son los tuneles de Vinh Moc. Estos tuneles cavados por la poblacion civil de los alrededores de la DMZ, tenian un uso unicamente defensivo y poseian tres niveles a 12, 17 y 23 metros, su principal objetivo era esconderse de los bombardeos americanos. Bastante claustrofobico, para que mentir, cuesta imaginar que la gente pudiese realizar su vida alli, pero lo hacian. Es sin duda la visita estrella y una buena forma de acabar el repaso de Historia que nos metimos ese dia….

Hoi An, un pueblo con encanto

 

Hoi An es una pequeña ciudad en la costa de Vietnam situada en el centro con un clima intermedio entre el norte y el sur y tiene unos 90.000 habitantes. En el siglo I el puerto de la ciudad era el mayor de todo el sudeste asiático y fue un importante centro de comercio durante los siglos XVI y XVI. Los espanoles, portugueses, holandeses, indios y japoneses mantuvieron tratos comerciales y se instalaron en la ciudad.

La ciudad mantiene un centro historico practicamente intacto desde el siglo XIX y XVIII ya que no fue danada a penas en la guerra con los americanos por la ambigua colaboracion de la ciudad con los dos bandos. Ello permite adentrarse en el verdadero Vietnam colonial que todavia no habiamos conocido. Los edificios de piedra y madera y de colores ocrees inundan el centro que se encuentra entre dos rios y cuenta con un puente japones del siglo XVI unido a una pagoda. Es un placer pasear por sus calles tanto de dia como de noche y tomarse algo en una de sus terrazas si el clima es agradable cosa que nosotros no disfrutamos.

La importancia comercial ha perdurado hasta hoy en dia y el centro se encuentra inundado de tiendas de ropa y tejidos, sobre todo seda, y talleres en los que la gente trabaja alli mismo y pueden fabricarte un traje a medida en tan solo un dia por precio irrisorio.

Como siempre, nos dejamos en el camino una gran oportunidad de llenar nuestro armario o mochila por un precio de escandalo pero el rumbo abierto nos exige una mochila de dimensiones manejables. Se de alguna que no hubiera podido resistirse…

La serpiente y Le Mat, el heroe santo.

La antigua aldea de Le Mat, en Hanoi, es conocida por su tradicion de caza de serpientes y la leyenda de San Le Mat. Uno de sus principales atractivos es su pueblo antiguo en cuyo templo, el héroe local Le Mat, es adorado. Según la leyenda, el rey Ly Thai Tong (1028-1054) tenía una hermosa hija que fue capturada por una serpiente en el río de Thien Duc Duong enviada por el Rey de las serpientes del rio. Su padre envió inmediatamente sus tropas para rescatar a la princesa, pero no podian luchar contra la serpiente bajo el agua. Un joven llamado Le Mat se ofrecio para salvar a la bella. Con una valentía excepcional, Le Mat, saltó al río, removiendo las fangosas aguas para combatir al monstruo. El héroe derrotó al Rey de las serpientes del Rio y devolvio a la princesa a su padre. En agradecimiento le ofrecieron un puesto en la corte y una recompensa de 100 kg de oro, seda, satén, que él rechazo.

Más tarde, Le Mat, que vivió una vida sencilla y sin lujos, contribuyo con la corte con el entrenamiento de tropas y el refuerzo de las defensas nacionales. En 1119, cuando falleció, el Rey Ly Nhan Tong le otorgo la Thuong Dang Phuc Than (Titulo de Buen Dios de primera clase) y ordeno a los aldeanos la construccion de un mausoleo en honor a su santidad. A pesar de que no es más que un dios popular, la mayoría de la gente en la región conmemora el pueblo con su nombre.

El templo, famoso por su intrincado interior, fue construido durante la dinastía Ly. El portico, esta construido con tres puertas y un curvado techo tubular. Las palabras grabadas en los muros recuerdan la heroica hazagna de Le Mat. Dentro, los cuatro pilares de cobre de 10 metros estan elaboradamente decorados con cuatro estatuas de criaturas : un dragon, una tortuga, un fenix y un quilin (criatura mitologica de origen chino con cuerpo de león, piel de pez y cuernos de ciervo). El santuario de la princesa se encuentra fuera de la zona occidental del templo. El templo ha sido restaurado en diversas ocasiones. En 1670 durante el reinado de Le Huyen Tong (1662-1671), fue renovado por el general Truong Phuc Hao, lo cual explica por qué el templo se asemeja al estilo de la dinastía Le posterior de la construccion.

Con su singular historia y arquitectura, el monumento ha resistido la prueba del tiempo y sirve como punto de gran interes turistico. El 23 de enero, una colorida fiesta anual se celebra para conmemorar a Le Mat por los vecinos del lugar. El pueblo de Le Mat es también conocido por su industris de caza de serpiente y por sus deliciosos platos cocinados con estos reptiles. Esta costumbre se remonta a la dinastía Ly y ha continuado hasta nuestros dias. Sin embargo, debido al peligro asociado, la gente ha dejado de capturar serpientes como lo hacian antes. Hay muchas familias en la aldea y, en particular, la familia Nguyen y la familia Tran, se consideran expertos en la captura y cria de serpientes.

La serpiente representa símbolo distintivo de la localidad, influyendo en el comercio, la gastronomia y los festivales de este pueblo. Le Mat se ha convertido en el centro de comercio de serpientes de las provincias del norte, y su nombre es conocido internacionalmente como la region de la serpiente de Vietnam.

Texto aportado por Pablas Barba Marmol, extraido de HerpDigest.Inc y traducido por Inaki Olazabal.

En dos dias estaremos subiendo para Hanoi y esperamos poder visitar este curioso pueblo. Ademas esperamos reencontrarnos alli con nuestro amigo Antonio. Magnana visitaremos la zona desmilitarizada (DMZ) y como siempre, os mantendremos al tanto.

Gracias por unir tu tesis con nuestro viaje, Pablo. La distancia muchas veces, puede acercar caminos. Un abrazo.

Nha Trang, Vietnam

Como solemos contar un poco las realidades de cada sitio por el que pasamos, hoy os hablo de Nha Trang, la tranquila ciudad de playa por la que pasamos hace unos dias.

Nha Trang es una ciudad vietnamita y aunque la llame tranquila tiene trafico y gente a todas horas. La ciudad tiene una playa de unos 6 kilometros de arena fina que es el mayor atractivo local. Los hoteles y resorts crecen como champignones

en la primera linea aunque se pueden encotrar gest houses mas baratas en el centro de la ciudad.

Un punto interesante de Nah Trang es que combina una playa cuidada y agradable con un patrimonio historico y cultural interesante. Hay varios museos, la galeria de Long Thanh de la que ya hablamos, un puerto con encanto y sobretodo las torres budistas de Po Nagar Cham del siglo VII, al margen del rio Cai, que son lugar de peregrinacion de muchos budistas de China y otros paises de budismo Mahayana. Dentro, el incienso hace llorar los ojos y pueden visitarse estatuas de diferentes deidades budistas e induistas del siglo IX.

Nuestra estancia estuvo un poco condicionada por el TET, el agno nuevo chino-vietnamita, pero el sitio merece una visita si se quiere disfrutar de la playa en un sitio de clima agradable o si se viaja de Ho Chi Minh city a Hanoi o viceversa. La ciudad es grande (unos 300.000 hab) y es una de las mas visitadas de Vietnam. Entre las actividades que se realizan, aunque no las hemos probado, tambien destacan los deportes acuaticos, sobre todo el buceo, el surfing, el senderismo y el ciclismo. A nivel gastronomico es conocida por el marisco.

Han sido unos dias agradables aunque el agno nuevo vietnamita no es el mejor momento para venir a un sitio tan turistico. Seguimos en rumbo hacia el norte, el rumbo abierto, claro ;).

Hue, Vietnam

Nuestra llegada a Vietnam fue un tanto dura. Tras dos intentos frustrados de coger el bus para Hue, una ciudad situada en el centro de Vietnam, al final lo conseguimos. El bus tardaba 20 horas, se podia fumar tranquilamente en el interior (con lo que les gusta fumar a los laosianos…)  y los conductores se turnaban para dormir en una hamaca estrategicamente situada en medio del pasillo. EL bus realizaba larguisimas e inexplicables paradas en medio de la carrtera, este es un fenomeno que nunca acabamos de comprender.

En fin, que llegamos a Vietnam un tanto cansados y enseguida percibimos algo distinto: la lluvia y sobretodo el frio. Hasta ahora practicamente en ningun lugar nos habia hecho falta ir abrigado durante el dia, en Vietnam si. Otra cosa de la que nos empezamos a dar cuenta es la aficion vietnamita a las motocicletas como medio de transporte. Ver un coche es lo raro, ir en moto lo mas normal. Y sobretodo un cambio de caracter: los laosianos son gente afable, poco preocupadas por ganar dinero y tranquila, quiza demasiado tranquila. Los vietnamitas dan la impresion contraria, hiperactivos, gesticuladores, guerreros, siempre pendientes de ganar un dong de mas. Para ejemplicarlo hay un dicho frances de la epoca colonial, que resume esta impresion : Mientras que el vietnamita cultiva el arroz, el camboyano observaba como crece y el laosiano escucha como crece. Nos hemos saltado a los camboyanos, un punto intermedio parece ser, asi que la impresion ha sido mas grande.

En cuanto a Hue, es una bonita ciudad situada a medio camino entre Saigon (Ho Chi Minh) y Hanoi. Fue la capital imperial del pais durante casi ciento cincuenta anios, desde 1802 hasta 1945. Los emperadores de origen mandarin que gobernaban en esa epoca quisieron crear un palacio imperial a la altura de la Ciudad Prohibida de Pekin y se pusieron en marcha. Decenas de miles de trabajadores empezaron su construccion a finales del siglo dieciocho creando una auntentica ciudad dentro la ciudadela, donde la zona mas impresionante era la dedicada al emperador, La Ciudad Purpura Prohibida. Sin embargo, para desgracia de la Humanidad, el complejo fue duramente bombardeado cuando los americanos intentaron retomar la ciudad en 1968. Gran parte de los pabellones, templos y cientos de habitaciones fueran arrasados. En la actualidad se ha declarado la Ciudadela Patrimonio de la Unesco y se esta intentando llevar a cabo su restauracion.

Por lo demas nuestro contacto con el frio no nos ha convencido mucho. Asi que hemos decidido tirar hacia el Sur, hacia la playita…Ya os  contaremos que tal!